HAITÍ: LA ONU AFRONTA SU PEOR TRAGEDIA
15 enero 2010
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Publicado por la Agencia Inter Press Service
Naciones Unidas, 15 de enero (IPS) - El terremoto que devastó Haití esta semana puede convertirse en el peor desastre para la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en ese país, donde tiene un personal de más de 9.000 miembros, entre soldados de las fuerzas de paz y funcionarios internacionales y locales.
El foro mundial se prepara para la peor de las situaciones posibles, en la que habría sufrido más de 100 bajas debido al sismo de 7.0 grados en la escala de Richter ocurrido el martes.
La devastación en Haití puede ser "una de las tragedias más horribles en la historia de las fuerzas de paz de la ONU", advirtió Alain LeRoy, secretario general adjunto para Operaciones de Mantenimiento de la Paz.
La Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah), creada en junio de 2004, tenía unos 3.000 soldados y policías apostados en Puerto Príncipe y sus alrededores, donde se sufrieron los mayores daños, y otros 6.000 distribuidos en el resto del país.
El Hotel Christopher, que fungía como sede de la ONU en Haití, se derrumbó durante el terremoto y posiblemente haya entre 100 y 150 personas atrapadas bajo sus escombros.
Susan Malcora, secretaria general adjunta del Departamento de Apoyo en el Terreno, sólo confirmó por ahora 16 víctimas fatales, entre ellas 11 de Brasil, tres de Jordania, una de Argentina y una de Chad, además de 56 lesionados.
Al mismo tiempo, informó, se desconoce el paradero de otros 150 funcionarios, entre ellos el representante especial en Haití, Hedi Annabi, el oficial de la ONU de más alto rango en ese país.
LeRoy dijo a la prensa que no puede confirmar si Annabi está con vida o no entre los escombros. "No hemos podido encontrarlo", declaró.
La ONU había sufrido una de sus mayores pérdidas humanas en agosto de 2003 con el atentado con bomba contra su sede en Bagdad, donde murieron 22 de sus funcionarios, entre ellos el representante especial en Iraq, Sérgio Vieira de Mello, y su jefa de personal, Nadie Younes.
Si las previsiones en Haití se confirman, opacarían por completo la tragedia de Bagdad.
Hasta la noche del miércoles, la ONU no había podido dar ninguna cifra precisa sobre víctimas debido al corte de las telecomunicaciones entre Nueva York y Puerto Príncipe a causa del sismo.
"Todavía no hemos establecido el número de muertos o heridos, pero tememos que podría ascender a centenares. Los servicios médicos están desbordados atendiendo heridos", declaró el martes a los periodistas el secretario general del foro mundial, Ban Ki-moon.
La ONU también tenía decenas de funcionarios que no pertenecían a la misión de mantenimiento de la paz, incluso del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, de la Organización Mundial de la Salud y del Programa Mundial de Alimentos.
Ban Ki-moon aclaró a la prensa que la información sobre el alcance completo de los daños era escasa.
El reconocimiento inicial y las evaluaciones aéreas dejaron en claro que el sismo tuvo un efecto devastador en la capital, mientras que el resto de Haití no parece haber sufrido mayores daños, explicó el secretario general.
"Como saben, los edificios y la infraestructura sufrieron graves daños en toda la capital. Los servicios básicos, como el agua y la electricidad, han dejado de funcionar casi por completo", agregó.
El secretario general adjunto para Asuntos Humanitarios, John Holmes, declaró a la prensa que la ONU también está muy preocupada por la suerte de la población de Puerto Príncipe y sus alrededores en general.
"Estamos haciendo los mayores esfuerzos posibles para comenzar con la operación humanitaria", dijo Holmes.
La prioridad son las tareas de búsqueda y rescate, porque muchas personas están atrapadas entre los escombros, no sólo en edificios de la ONU sino en otras partes, explicó Holmes.
"Sabemos que hay equipos de búsqueda y rescate en camino desde Estados Unidos, desde China, desde Francia a través de Guadalupe, y desde República Dominicana y otros países", añadió.
Naciones Unidas, 15 de enero (IPS) - El terremoto que devastó Haití esta semana puede convertirse en el peor desastre para la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en ese país, donde tiene un personal de más de 9.000 miembros, entre soldados de las fuerzas de paz y funcionarios internacionales y locales.
El foro mundial se prepara para la peor de las situaciones posibles, en la que habría sufrido más de 100 bajas debido al sismo de 7.0 grados en la escala de Richter ocurrido el martes.
La devastación en Haití puede ser "una de las tragedias más horribles en la historia de las fuerzas de paz de la ONU", advirtió Alain LeRoy, secretario general adjunto para Operaciones de Mantenimiento de la Paz.
La Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah), creada en junio de 2004, tenía unos 3.000 soldados y policías apostados en Puerto Príncipe y sus alrededores, donde se sufrieron los mayores daños, y otros 6.000 distribuidos en el resto del país.
El Hotel Christopher, que fungía como sede de la ONU en Haití, se derrumbó durante el terremoto y posiblemente haya entre 100 y 150 personas atrapadas bajo sus escombros.
Susan Malcora, secretaria general adjunta del Departamento de Apoyo en el Terreno, sólo confirmó por ahora 16 víctimas fatales, entre ellas 11 de Brasil, tres de Jordania, una de Argentina y una de Chad, además de 56 lesionados.
Al mismo tiempo, informó, se desconoce el paradero de otros 150 funcionarios, entre ellos el representante especial en Haití, Hedi Annabi, el oficial de la ONU de más alto rango en ese país.
LeRoy dijo a la prensa que no puede confirmar si Annabi está con vida o no entre los escombros. "No hemos podido encontrarlo", declaró.
La ONU había sufrido una de sus mayores pérdidas humanas en agosto de 2003 con el atentado con bomba contra su sede en Bagdad, donde murieron 22 de sus funcionarios, entre ellos el representante especial en Iraq, Sérgio Vieira de Mello, y su jefa de personal, Nadie Younes.
Si las previsiones en Haití se confirman, opacarían por completo la tragedia de Bagdad.
Hasta la noche del miércoles, la ONU no había podido dar ninguna cifra precisa sobre víctimas debido al corte de las telecomunicaciones entre Nueva York y Puerto Príncipe a causa del sismo.
"Todavía no hemos establecido el número de muertos o heridos, pero tememos que podría ascender a centenares. Los servicios médicos están desbordados atendiendo heridos", declaró el martes a los periodistas el secretario general del foro mundial, Ban Ki-moon.
La ONU también tenía decenas de funcionarios que no pertenecían a la misión de mantenimiento de la paz, incluso del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, de la Organización Mundial de la Salud y del Programa Mundial de Alimentos.
Ban Ki-moon aclaró a la prensa que la información sobre el alcance completo de los daños era escasa.
El reconocimiento inicial y las evaluaciones aéreas dejaron en claro que el sismo tuvo un efecto devastador en la capital, mientras que el resto de Haití no parece haber sufrido mayores daños, explicó el secretario general.
"Como saben, los edificios y la infraestructura sufrieron graves daños en toda la capital. Los servicios básicos, como el agua y la electricidad, han dejado de funcionar casi por completo", agregó.
El secretario general adjunto para Asuntos Humanitarios, John Holmes, declaró a la prensa que la ONU también está muy preocupada por la suerte de la población de Puerto Príncipe y sus alrededores en general.
"Estamos haciendo los mayores esfuerzos posibles para comenzar con la operación humanitaria", dijo Holmes.
La prioridad son las tareas de búsqueda y rescate, porque muchas personas están atrapadas entre los escombros, no sólo en edificios de la ONU sino en otras partes, explicó Holmes.
"Sabemos que hay equipos de búsqueda y rescate en camino desde Estados Unidos, desde China, desde Francia a través de Guadalupe, y desde República Dominicana y otros países", añadió.