LA PYME CHILENA Y EL MERCADO CHINO (ANÁLISIS)
25 noviembre 2010
Fuente: Publicado por La Nación, Chile
Fuente: Publicado por La Nación, Chile
Santiago, 25 de noviembre- La importación de manufactura china es lo que ha hecho terminar la producción nacional de varios ítemes industriales: textil, calzado, juguetes, etc. debido a sus bajos precios. Estos precios se explican por la baja remuneración de la mano de obra china, (en las zonas industriales los sueldos promedios rondan los 70 euros (alrededor de $46.000).
China es el país más poblado de la tierra con más 1.300 millones de habitantes (un quinto del total); es el cuarto país más grande en territorio sólo superado por Rusia, Canadá y Estados Unidos; es el primer exportador mundial, un 25% de todos los bienes manufacturados en el mundo se produce en China; China como producto interno bruto es la cuarta economía del planeta.
Desde mediados de los 70, después de la muerte del líder histórico, Mao Zedong, comenzaron los cambios económicos que fueron impulsados por otro líder, Deng Xiaoping. Se permitió un rol importante a la propiedad privada, especialmente en las zonas urbanas y costeras y en las ciudades incorporadas al país tardíamente (Hong Kong y Macao). Se permitió la inversión extranjera en gran escala, pero la economía sigue siendo en lo esencial controlada por el Estado.
Existe una Pequeña y Mediana Empresa (pyme) china que está esencialmente centrada en la manufactura y los servicios, con una ayuda sustancial del Estado a través del financiamiento y la capacitación que logra concentrar parte importante de la oferta de trabajo local y que es el sector más dinámico y exportador.
Estos cambios permitieron consolidar un modelo que ha mantenido un crecimiento del producto superior al 10% anual y en algunos años acercándose al 15%.
Para Chile, China es muy importante pues es el primer socio comercial que tenemos en el mundo. Representa un cuarto del total de nuestras exportaciones, siendo casi todo cobre. La manufactura importada por Chile viene en lo esencial de China.
Varias personas se han preguntado qué pasaría si cada chino se comiera una manzana, un racimo de uva o se tomará un vaso de vino. Evidentemente la producción de Chile quedaría corta. Pero eso es iluso, pues nada sucede así. Se trata de procesos y de competencia en un mercado global y globalizado.
La importación de manufactura china es lo que ha hecho terminar la producción nacional de varios ítemes industriales: textil, calzado, juguetes, etc. debido a sus bajos precios. Estos precios se explican por la baja remuneración de la mano de obra china, (en las zonas industriales los sueldos promedios rondan los 70 euros (alrededor de $46.000).
China aplica un tipo de cambio que también favorece a sus exportadores y no así a las importaciones; los gastos sociales (educación, salud, previsión, etc.) son cubiertos por el Estado chino, como país con economía centralmente planificada.
Es difícil que la pyme chilena logre exportar (la participación directa de la mipyme en la exportación es de 4%) su producción a China, pues tenemos muchos elementos que conspiran contra esta aspiración: falta de recursos financieros, falta de redes mundiales que favorezcan este tipo de comercio, las propias restricciones del mercado chino a los productos importados, etc.