CUBA: LA BÚSQUEDA DE NUEVAS REFORMAS SERÍA LA FÓRMULA PARA REACTIVAR LA ECONOMÍA (ANÁLISIS)
04 marzo 2011
Fuente: Publicado por AméricaEconomía, Chile
Fuente: Publicado por AméricaEconomía, Chile
La Habana, 4 de marzo Las reformas para modernizar la atribulada economía de Cuba serán cruciales en momentos en que el presidente Raúl Castro intenta asegurar que el sistema comunista edificado hace cinco décadas sobreviva la salida de escena de sus veteranos líderes.
El gobierno sobrecargado de deudas y corto de efectivo está buscando reducir su papel y mantener su control de la economía, permitiendo la expansión del sector privado y reduciendo el gasto público.
Cuba puede recibir un fuerte espaldarazo si resulta exitosa la exploración petrolera en aguas cubanas del Golfo de México a mediados del 2011, aunque las difíciles relaciones con Estados Unidos podrían interferir.
Reformas económicas. Para enfrentar los crónicos problemas económicos de la isla, Raúl Castro prevé recortar unos 500.000 empleos estatales antes de marzo, pero se ha retrasado. El presidente dijo al Consejo de Ministros que el cronograma de los despidos se dilataría para suavizar su impacto, pero no aclaró cuánto tiempo.
Alrededor de 200.000 de esos empleados serían absorbidos por cooperativas que serán creadas en empresas públicas o le alquilarán al Estado medios como taxis. Al menos 75.000 permisos para montar pequeños negocios ya fueron entregados y las calles de Cuba están llenándose de cafeterías y puestos de venta de DVD piratas.
El Gobierno espera crear suficientes empleos en el corto plazo para absorber a quienes queden cesantes. Inicialmente, reducirá unos 500.000 empleos públicos y en los próximos años planea eliminar otros 500.000. Simultáneamente permitirá una mayor expansión del sector privado.
A pesar de algunos modestos cambios al comienzo del gobierno del presidente Barack Obama, las relaciones entre Cuba y Estados Unidos se descongelaron apenas ligeramente y las perspectivas de avances de corto plazo parecen tenuesAún no está claro qué tan profundas serán las reformas entre las 3.700 empresas estatales, que controlan un gran porcentaje de la economía cubana y la mayoría pierde dinero.
Entre las propuestas que serán consideradas en abril por un congreso del gobernante Partido Comunista figura darle mayor autonomía a esas empresas, pero mantenerlas dentro de la esfera estatal.
Castro, quien reemplazó a su hermano Fidel como presidente en el 2008, ha dicho que las reformas económicas son esenciales para mantener el sistema socialista instaurado en la isla tras la revolución de 1959. Pero no está claro si estas reformas van a aumentar la productividad y fortalecer la economía doméstica como él espera.
Muchos cubanos están interesados en trabajar por cuenta propia, pero al propio tiempo están preocupados por las regulaciones, impuestos y falta de créditos que limitarán el éxito de los nuevos empresarios.
Además, existe la preocupación de que los recortes disparen el desempleo y den lugar a problemas sociales en un país donde los cubanos han tenido, básicamente, el empleo garantizado durante décadas.
Castro ha hecho ya otras reformas, particularmente en la agricultura, buscando incrementar la producción y reducir la importación de alimentos. Pero la producción agrícola ha disminuido, ya que los agricultores se quejan de que siguen muy controlados por el Estado.
Problemas de efectivo. Cuba, duramente golpeada por huracanes en el 2008 y por la crisis global, ha estado tan corta de divisas que suspendió el pago de muchos de sus compromisos y congeló hace dos años las cuentas bancarias de empresas extranjeras.
La situación se ha aliviado, pero aún no está resuelta
Para evitar la escasez de efectivo en el futuro, Castro ha buscado reducir gastos y obtener más ingresos para el Estado, que controla un 85 por ciento de la economía de Cuba. También redujo un 30 por ciento las importaciones.
Los impuestos que deberán pagar los nuevos empleados por cuenta propia serían una fuente adicional de ingresos para el Estado, que también espera aumentar las exportaciones tradicionales de níquel y el turismo, dos de sus mayores fuentes de divisas.
El Gobierno ha dicho que permitirá la construcción de campos de golf con el objetivo de atraer turistas con mayores recursos.
El presidente estadounidense, Barack Obama, suavizó en enero las prohibiciones de viaje a Cuba , pero la mayoría de los estadounidenses todavía no pueden visitar la isla debido al embargo comercial impuesto en 1962.
Planes de exploración petrolera. La Habana tiene grandes esperanzas en el petróleo para su desarrollo futuro y está preparando ansiosamente un consorcio liderado por la petrolera española Repsol-YPF para que perfore un pozo de exploración en el 2011. Una plataforma contratada por Repsol-YPF debería llegar a Cuba a fines de agosto, si todo sale bien.
El congresista estadounidense Vern Buchanan, del estado de Florida, introdujo un proyecto de ley que autorizaría acciones punitivas contra compañías que perforen en Cuba, argumentando que la exploración presenta riesgos ambientales. El embargo prohibe a las petroleras estadounidenses operar en Cuba.
Otras empresas como la estatal malaya Petronas, asociada con la rusa Gazprom Neft y una unidad de la india ONGC planean usar la misma plataforma china para perforar los bloques que contrataron en el Golfo de México. La petrolera estatal rusa Zarubezhneft dijo que comenzaría la exploración de dos bloques adyacentes a la costa de Cuba en el 2011, pero está buscando socios.
Cuba, que depende de las importaciones de petróleo de su aliado socialista Venezuela, calcula que podría tener reservas por hasta 20.000 millones de barriles de crudo. El Servicio Geológico de Estados Unidos cree que los yacimientos tendrían unos 5.000 millones de barriles.
Una unidad de China National Petroleum Corp. invertiría unos 6.000 millones de dólares en la refinería de Cienfuegos, en el centro de Cuba, con financiamiento en su mayoría del Eximbank de China, respaldado por crudo venezolano.
Relaciones Cuba-EE.UU
A pesar de algunos modestos cambios al comienzo del gobierno del presidente Barack Obama, las relaciones entre Cuba y Estados Unidos se descongelaron apenas ligeramente y las perspectivas de avances de corto plazo parecen tenues, debido a la detención desde hace casi un año en La Habana del contratista estadounidense Alan Gross.
Gross, preso desde hace 15 meses, será llevado a juicio el 4 de marzo por delitos contra la seguridad del Estado por entregar equipos ilegales de comunicación a disidentes. Su condena podría complicar todavía más las relaciones de Cuba y Estados Unidos.
Washington dice que Gross sólo ayudaba a la comunidad judía de la isla a acceder a internet, pero Cuba sospecha del contratista porque trabajaba para un programa financiado por el Gobierno de Estados Unidos para promover cambios en la isla.
Una funcionaria estadounidense expresó recientemente su prudente optimismo sobre la posibilidad de que Gross sea juzgado y repatriado.
El Gobierno cubano está en medio de un proceso de liberación de presos políticos con la condición de que se marchen a España con sus familiares, resolviendo así uno de sus mayores problemas con la comunidad internacional y sacando a sus opositores del país.
Aunque la reacción de Estados Unidos ha sido prudente, la Unión Europea ordenó a su jefa de relaciones internacionales que explorar cómo mejorar las relaciones con Cuba.
Cuba ha ido construyendo relaciones con otras naciones cruciales, entre ellas China, Brasil, Rusia y España. Tiene una relación especial con Venezuela, una nación miembro de la OPEP cuyo presidente Hugo Chávez es cercano a Fidel Castro y acordó en noviembre extender su cooperación económica con Cuba por 10 años más.