LAS EMPRESAS MULTI-LATINAS (ANÁLISIS)

14 marzo 2011

Fuente: Publicado por Diario Panorama, Argentina

Santiago del Estero, Argentina, 14 de marzo- Estos tiempos, largamente esperados por los países de Sudamérica, con los precios de sus manufacturas exportables revalorizándose frente a los bienes de los países industrializados, va dejándose atrás la recomendación de la CEPAL de “sustituir las importaciones”, válida cuando estas relaciones de precios se deterioraban, en un proceso inverso al actual.

Estos tiempos, largamente esperados por los países de Sudamérica, con los precios de sus manufacturas exportables revalorizándose frente a los bienes de los países industrializados que, a su vez, necesitan importar para su consumo y producción interna, van dejando atrás la recomendación de la CEPAL (Comisión Económica para América Latina) de “sustituir las importaciones”, válida cuando estas relaciones de precios, los “términos de intercambio”, se deterioraban, en un proceso inverso al actual.

Los crecientes saldos netos positivos de sus comercios exteriores (exportaciones-importaciones) han animado a muchos gobiernos de la región a apoyar estratégicamente a sus mas grandes grupos empresariales privados a hacer uso de la llamada “ventaja del atraso relativo”, mediante la cual pueden incorporar directamente a sus actuales procesos productivos tecnologías que ya están desarrolladas, con menores costos y mas rápido que las empresas de los países industrializados.

Sin anacrónicos prejuicios ni infructuosos debates ideológicos, con una estrategia pragmática pero consensuada, estas empresas reciben de sus gobiernos explícitos y racionales apoyos de largo plazo para su crecimiento secuencial: en primer termino, su fortalecimiento local, pero con el compromiso del posterior avance regional y, por último, el principal objetivo de resultar grupos empresariales globales que “salgan al mundo”.

En nuestro país, lo visualizamos con el avance de las empresas mexicanas en telecomunicaciones y alimentos, las brasileñas en frigoríficos, textiles y cementeras y las chilenas en minería y energía, entre otros variados sectores. Son las empresas llamadas “multi-latinas” que, desde la región latinoamericana, están surgiendo al mundo con recursos humanos muy capacitados y suficiente capital, comercializando globalmente servicios y manufacturas, tanto de origen agropecuario como industrial.

Así, estas empresas obtienen parte de la renta económica mundial, tanto para ellas que reinvierten en más empleos privados calificados y tecnologías, como para los gobiernos de sus países, mediante los impuestos internos, que con razonables organizaciones de sus sistemas políticos, incrementan el producto nacional y la calidad de vida de sus habitantes. El análisis de las actuales 100 empresas “multi-latinas” más grandes, encuentra a nuestro país con solamente 7 de ellas, muy por detrás de las 34 brasileñas, las 28 mexicanas y las 21 chilenas.

Una moderna estrategia de inserción internacional de la producción argentina, de concretos resultados sobre el bienestar general de la población, es otro más de los puntos ausentes en la agenda del actual “modelo nacional”, encerrado en improductivos fundamentalismos ideológicos y segregacionistas revisiones históricas.