AMÉRICA LATINA CONFÍA EN QUE ÉSTA SERÁ SU DÉCADA (ENTREVISTA CON REBECA GRYNSPAN, SECRETARIA GENERAL ADJUNTA DE LA ONU)
02 mayo 2011
Fuente: Tomado de Inter Press Service
Fuente: Tomado de Inter Press Service
Río de janeiro, 2 de mayo (IPS)- Ésta podría ser la década de América Latina, una de las regiones que sobrellevó mejor la crisis financiera y económica internacional a psar de sus grandes desigualdades, destacó en conversación con IPS la secretaria general adjunta de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Rebeca Grynspan.
Este optimismo fue general en la sexta edición del Foro Económico Mundial para América Latina, que cerró el viernes en esta ciudad brasileña con perspectivas optimistas para la región.
Pasado el fantasma de la crisis financiera, que amargó las últimas ediciones regionales de 2010 en Bogotá y de 2009 también en Río de Janeiro, se abrió un espacio para proyecciones de escenarios más positivos para los países latinoamericanos.
Con 600 millones de habitantes, cerca de ocho por ciento de la población mundial, y un tercio de las fuentes de agua del planeta, hay razones para esta confianza, sostuvo Grynspan, también administradora asociada del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
El encuentro en Río de Janeiro reunió a 700 líderes ejecutivos y gubernamentales para discutir los rumbos de la economía regional.
"Me parece que hay razones objetivas para el optimismo del que se habla. No sólo porque América Latina fue menos impactada en esta crisis que muchos de los otros continentes y en el mundo desarrollado, sino también porque los impactos sociales de la crisis fueron mucho menores de lo que esperábamos", afirmó Grynspan.
No obstante, la desigualdad en América Latina sigue siendo la más profunda del planeta, aunque en los últimos seis años 40 millones de personas salieron de la pobreza en la región.
"El tema es complejo porque hay muchas desigualdades que se entrecruzan. América Latina tiene un nivel de pobreza excesivo para su nivel de desarrollo", apuntó.
La economista costarricense alertó que, en medio del optimismo, no había que olvidar los problemas que aún existen para la distribución de la riqueza y la extensión de beneficios sociales.
"Por ser un continente tan desigual, la elasticidad de la pobreza con respecto al crecimiento es muy baja, y los beneficios del crecimiento se distribuyen muy desigualmente", dijo.
La región enfrenta barreras que impiden la competitividad, a pesar de ser una importante productora y exportadora de materias primas y bienes agropecuarios con una de las mayores reservas de biodiversidad y de fuentes renovables de energía.
Basar el comercio exterior en la exportación de materias primas es un riesgo, pero no debe ser visto como una condena, sostuvo Grynspan.
"Es un riesgo, pero a diferencia de otras opiniones, eso no tiene que ser una maldición. Está el peligro de lo que se llama de ‘reprimarización’ de la economía latinoamericana, que existe y es real", añadió.
Pero hoy en día, destaca la economista, está la posibilidad de basar la competitividad de los recursos naturales incorporando alta tecnología, conocimiento, innovación y alto valor agregado.
"Algunos sectores ya lo están haciendo. Hay una amenaza, pero también pude ser una gran oportunidad", destacó.
La protección de los ecosistemas debe seguir la meta de un desarrollo regional más sostenible. Aunque América Latina concentre alrededor de ocho por ciento de la población mundial, 31 por ciento de las fuentes de agua del planeta están en el continente.
"La región tuvo una gran ventaja en su ubicación de recursos naturales. Si perdemos la protección de los ecosistemas podemos perder una base importante de nuestra competitividad", alertó.
Por otra parte, señaló que el sistema educativo de la región era malo en general. "En mi opinión, debemos ser capaces de educar mejor y no sólo más. La calidad de nuestra educación es muy mala en general, y más baja que la de nuestros competidores", indicó.
En el análisis de la alta representante de las Naciones Unidas, el punto clave para proyectar la región hacia su tan esperada década de expansión son las inversiones.
Grynspan indicó que la región aún presentaba una de las tasas más bajas de inversión. "Tenemos que invertir más. Se ha comenzado a poner énfasis en el tema de la infraestructura porque para aumentar la productividad de América Latina va a haber que hacer una inversión en el sector muy considerable en los próximos años", señaló.