PRESIDENTES DE NICARAGUA Y HONDURAS ABREN DIÁLOGO EN MANAGUA

Managua, 27 de abril (PL).- Los presidentes de Nicaragua, Daniel Ortega, y Honduras, Porfirio Lobo, sostienen un encuentro en esta capital para examinar temas como la seguridad en Centroamérica y el reforzamiento de las relaciones bilaterales.

En breves declaraciones a la prensa desde la Casa de los Pueblos, ambos mandatarios señalaron el interés por fortalecer los vínculos binacionales y a escala regional.

Ortega distinguió responsabilidad particular de ambos Estados, pues Honduras ejerce la presidencia del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) y en junio entrante corresponderá asumir el cargo a Nicaragua.

Dentro de la agenda en examen, explicó el dignatario anfitrión, se hallan la labor de SICA, los problemas de seguridad regional, el intercambio comercial bilateral y el cumplimiento de los acuerdos suscritos recientemente entre Honduras, Nicaragua y El Salvador para el desarrollo de la zona limítrofe del golfo de Fonseca.

En esa área, de cara al océano Pacífico, convergen más de tres millones de habitantes de los tres Estados ribereños, y a juicio de las autoridades posee un gran potencial para la preservación del ecosistema, el fomento del turismo a escala competitiva internacional, la investigación científica y la explotación racional y sostenible de sus recursos naturales.

Las tres naciones ratificaron en una reciente foro en San Salvador, la decisión de convertir al golfo de Fonseca en una "Zona de Paz, Desarrollo Sostenible y Seguridad", reafirmaron el compromiso de privilegiar el diálogo y la negociación frente a cualquier conflicto y nunca más utilizar el recurso de una solución militar, como ocurrió en el pasado.

Según confirmaron, Ortega y Lobo también conversaráneste jueves con representantes de los consejos de las empresas privadas, jefes de Policía y ministros del área centroamericana reunidos en esta capital, en evento en el que evalúan la situación de la seguridad ciudadana.

Por su parte, el gobernante hondureño recordó que las naciones centroamericanas enfrentan, en mayor o menor medida, problemas comunes, y el esfuerzo no es solo desde el punto de vista de la represión del delito, porque también incluye la prevención.

Una de las preocupaciones compartidas, comentó, es cómo mejoramos el entorno de las poblaciones con programas sociales y, en ese sentido, reconoció la necesidad de modificar actitudes en su país. "Estamos tratando de cambiar la cultura de la violencia por la cultura de vida", indicó.

Ambos jefes de Estado ofrecerán información sobre el resultado de las pláticas al final de la jornada.

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