AMÉRICA LATINA LLEGA AL G20 CON ALERTAS SOBRE CRECIMIENTO Y SALIDA DE CAPITALES

02 septiembre 2013

Fuente: Publicado por la Agencia AFP, vía Google Noticias

Washington, 2 de septiembre (AFP).- Los miembros latinoamericanos del G20 (Argentina, Brasil y México) se preparan para la cumbre del foro en Rusia la semana próxima en un contexto de alertas sobre el crecimiento de los países emergentes, y preocupación por un eventual endurecimiento de la política monetaria en Estados Unidos.

América Latina crecerá menos de lo previsto este año, en torno a 3% según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), principalmente porque Brasil y México estarán lejos de su potencial.

En Brasil, la mayor economía regional, el gobierno llevó de un 4% a 2,5% su proyección de crecimiento para 2013, al tiempo que México, segunda economía latinoamericana, está en franca desaceleración y la previsión oficial pasó de 3,1% a un muy modesto 1,8%.

El fenómeno no es ajeno a las demás grandes economías emergentes del planeta que integran el G20, como China e India, advirtió el FMI en julio.

El Fondo vaticinó que el PIB global crecerá este año 3,1%, contra 3,3% que esperaba en abril.

Entre las causas principales de este panorama poco halagüeño para países acostumbrados a fuertes tasas de crecimiento en los últimos años, el organismo financiero destaca la creciente volatilidad de los mercados financieros y el eventual incremento de las tasas de interés en las economías centrales.

"Las economías de los mercados emergentes en general han sido las más afectadas, luego de que recientes incrementos de las tasas de interés en las economías avanzadas y volatilidad en los precios de los activos, combinados con una actividad doméstica más débil provocara algunas salidas de capitales (...) y depreciación de la moneda", señaló el Fondo.

Influencia de la FED

Los países latinoamericanos del G20, y otras economías regionales muy abiertas como Colombia y Chile, enfrentan el mismo escenario: la posibilidad de que una recuperación en EEUU lleve a la Reserva Federal a retirar estímulos monetarios significaría un recorte de la abundante liquidez que introduce en el circuito financiero desde que estalló la crisis en 2008.

"Lo que en algún momento fue dinero a cero o a tasas muy bajas, va a comenzar a disminuir e implica menos flujos (a) países emergentes", explicó Francisco Chaves, analista de Corredores y Asociados en Colombia.

La Fed inyecta 85.000 millones de dólares en compras de bonos del Tesoro mensualmente y mantiene tasas ultrabajas para fomentar el consumo y la inversión.

Si ese panorama cambia, Estados Unidos será más atractivo para los inversores y para algunos capitales colocados hoy en mercados emergentes. Y los efectos de esta eventualidad se hacen sentir en las monedas locales.

El real ha perdido más de 14% en el año, el peso mexicano lleva una caída de poco más de 4%, en tanto el peso colombiano bajó 9% y el chileno casi 8%. En Argentina la salida de capitales, estructural en ese país, hizo que el gobierno estableciera un férreo control cambiario que creó de hecho un mercado paralelo en el que el dólar cotiza 50% por encima del tipo de cambio oficial.

"Varios países, especialmente los más integrados al mercado financiero internacional, como Brasil, Chile, Colombia, México y Perú, fueron afectados no solo por una mayor volatilidad cambiaria sino que en varios casos tendieron a aumentar presiones para que se depreciaran sus monedas", dijo Juan Alberto Fuentes, director de Desarrollo Económico de la CEPAL.

"Es probable que el tema del fin de los estímulos monetarios por parte de Estados Unidos, y eventualmente por parte de otros países desarrollados, reciba atención (en el G20), con vistas a reducir la volatilidad financiera y la incertidumbre que ello ha ocasionado", añadió.

Perspectiva incierta

Brasil, que registró una caída del real en las últimas semanas a mínimos en cuatro años, tomó medidas para frenar la tendencia, y su banco central interviene cotidianamente en el mercado con ofertas de dólares.

La presidenta Dilma Rousseff dijo que el país tiene las "armas" necesarias para enfrentar la situación gracias a sus abundantes reservas monetarias.

Colombia en tanto, propuso "un diálogo de alto nivel" sobre "los efectos de la normalización de la política monetaria en Estados Unidos", según su ministro de Hacienda, Mauricio Cadenas.

México llega al G20 a mostrar su intención de realizar reformas estructurales importantes en sectores clave como energía o telecomunicaciones.

Sin embargo "no llega lo suficientemente fuerte económicamente hablando", tiene una "desaceleración importante" y "creo que el más preocupado en este caso es el presidente (Enrique Peña Nieto), que tenía la intención de llegar más fortalecido" en busca de una "mayor inversión extranjera directa", sostuvo Abraham Vergara, de la privada Universidad Iberoamericana.

Para la CEPAL, "el contexto interno más débil de algunos países demandaría impulsos monetarios, reducción de las tasas". Sin embargo, al tiempo que en Brasil la suba de la tasa de referencia es el instrumento escogido para contener presiones inflacionarias, en otros países, "el contexto externo pone una severa limitación a una estrategia de reducción de tasas" que "estimularía (...) una mayor salida de capitales".