OIT/CEPAL: LA TASA DE DESEMPLEO EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE PODRÍA BAJAR A 6,2% EN 2013
31 octubre 2013
Fuente: Tomado de la Web de la CEPAL
Fuente: Tomado de la Web de la CEPAL
Santiago, 31 de octubre.- La región de América Latina y el Caribe podría cerrar el año con una tasa de desempleo urbano situada en un rango de 6,2% a 6,3%, lo que significa una leve disminución respecto al 6,4% registrado en 2012, según las últimas proyecciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
"El primer semestre de 2013 no ha sido un período fácil para América Latina", señala el documento Coyuntura laboral de América Latina y el Caribe n.° 9, debido al bajo dinamismo de la economía mundial, la mayor volatilidad de los mercados financieros y el debilitamiento de la demanda interna. Durante la primera mitad del año, la economía regional se expandió solo 2,5% respecto al mismo período de 2012.
La desaceleración del crecimiento económico de la región durante el primer semestre de 2013 se tradujo en una menor demanda laboral. Esto se expresó, específicamente, en una menor generación de empleo asalariado. Mientras en 2012 este creció 3,1% a nivel regional, para el primer semestre de 2013 se estima una expansión de solo 1,6% (sobre la base de 10 países con datos). Aún así, el empleo asalariado aumentó su proporción en el conjunto del empleo en la mayoría de los países.
El menor dinamismo en la generación de empleo no significó un aumento del desempleo porque en los primeros seis meses de 2013 se revirtió el aumento relativamente fuerte de la tasa de participación laboral de 2012. En los 10 países con información esta dejó de crecer en el primer semestre.
Uno de los aspectos destacados en el informe es que se mantuvo la tendencia descendente de la tasa de desempleo iniciada en 2004, aunque con bajas muy modestas.
Para los 10 países con información disponible, la tasa de desempleo urbano pasó en promedio de 6,7% en el primer semestre de 2012 a 6,6% en igual período de 2013, aunque en Argentina, Jamaica, México y Uruguay se registró un aumento. Con la excepción de Jamaica, los incrementos fueron moderados, de menos de medio punto porcentual.
Por otra parte, continuó la reducción de las brechas entre hombres y mujeres en términos de participación laboral, ocupación y desempleo, pese a las diferencias entre países.
En cuanto a los salarios reales, en la mayoría de los países estos continuaron creciendo durante la primera mitad del año, sin bien con tasas algo más modestas que en el promedio de 2012.
En la segunda sección del documento preparado por la CEPAL y la OIT se analizan las transformaciones de los sistemas nacionales de formación profesional y capacitación en América Latina y el Caribe, que enfrentan nuevos desafíos en el contexto de los cambios económicos, productivos y tecnológicos en curso en la región que se expresan en una demanda más diversificada.
En este marco se han introducido una serie de innovaciones respecto a los contenidos, los métodos, las tecnologías utilizadas, la institucionalidad y la coordinación de la formación profesional.
"Un reto permanente de los sistemas nacionales de formación profesional consiste en su papel de contribuir a reducir las desigualdades que caracterizan los mercados laborales de la región", dicen en el prólogo de la publicación Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, y Elizabeth Tinoco, Directora Regional de la Oficina de la OIT para América Latina y el Caribe.
Por ello es importante que estos sistemas se integren con otros instrumentos de las políticas del mercado de trabajo y que se desarrollen ofertas efectivas para fomentar la inserción laboral productiva de grupos que enfrentan obstáculos específicos.
Una fuerza laboral con habilidades, competencias y conocimientos que se ajusten a la demanda, tanto de las empresas formales como del sector informal, y que respondan a las necesidades y preferencias de la población, es clave para reducir las brechas externas e internas de productividad en América Latina y el Caribe y avanzar hacia un desarrollo sostenible, resaltan ambas instituciones.