TRES IMPORTANTES RECONOCIMIENTOS PARA EL SALVADOR
Fuente: http://www.elsalvador.com/ con información del Ministro de Relaciones Exteriores
El Salvador, se está convirtiendo en una nación que cada vez más adquiere un notable protagonismo en el escenario internacional, por su capacidad para aportar a la región y al mundo en temas que resultan de indiscutible relevancia para sus habitantes.
2017 será precisamente un año que reflejará ese liderazgo, acercándonos aún más a la visión institucional del Ministerio de Relaciones Exteriores, la cual apunta a que seamos reconocidos internacionalmente como un país promotor del respeto a los derechos humanos, la paz, la democracia, el desarrollo económico, la integración regional, la cooperación, el diálogo y las relaciones con todos los países del mundo.
El primer hecho reciente que nos conduce a ese propósito ha ocurrido hace dos semanas, cuando durante la XXI Reunión Viceministerial de la Conferencia Regional sobre Migración (CMR), asumimos para el próximo año la Presidencia Pro Témpore de dicho espacio, bajo la cual impulsaremos como tema central el de las mujeres migrantes.
Este foro intergubernamental, que aglutina a las 11 naciones de Centro y Norteamérica, además de una serie de países y organismos observadores, nos permitirá propiciar el intercambio de ideas y experiencias en materia migratoria, así como la puesta en marcha de acciones concretas que nos ayuden a superar los desafíos que nos impone la migración.
De gran importancia histórica es también el apoyo que hemos recibido del Grulac (Grupo Latinoamericano y del Caribe) para presidir el próximo año el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas. Se trata del principal órgano permanente en la materia en el seno de este organismo multilateral, al cual ingresamos hace solo dos años, con la convicción de que los derechos humanos son una condición indispensable para lograr el desarrollo de los pueblos.
Nuestro objetivo al frente de dicho Consejo será contribuir al fortalecimiento del Sistema Internacional de los derechos humanos; trabajar en una cultura de respeto, protección y promoción de los mismos; promover una visión de conjunto que propicie los espacios de diálogo y de cooperación alrededor del tema; y cultivar un entorno más inclusivo y constructivo en este órgano, donde los países en desarrollo puedan impulsar una agenda integral acorde con las necesidades de todos.
Siendo una nación que, hace apenas tres décadas, figuraba aún en las noticias internacionales por los múltiples atropellos a los derechos humanos, el estar liderando ahora esfuerzos regionales y mundiales a favor de su respeto es algo que debe llenarnos de orgullo. Es una muestra de cuánto hemos avanzado como sociedad, de nuestra firme voluntad para no repetir los lamentables abusos del pasado y del alto compromiso del gobierno del presidente Salvador Sánchez Cerén con dar cumplimiento a las obligaciones internacionales del Estado salvadoreño en la materia.
Pero además de estos dos espacios, hay un tercero en el cual, también en enero, tomaremos su conducción para todo 2017: la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), el único mecanismo de diálogo y concertación que agrupa de forma permanente a los 33 países de la región, con el objetivo de avanzar en el proceso de integración política, económica, social y cultural de nuestras naciones.
En los meses anteriores, El Salvador venía ya jugando un papel relevante dentro de la Comunidad, alrededor de temas como el de adelanto de la mujer - donde ejercemos la coordinación del respectivo grupo de trabajo-, agricultura familiar, migración, y tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras. Creemos en el potencial de este foro y, durante nuestra Presidencia Pro Témpore, apostaremos entonces a profundizar la cooperación Sur-Sur en diversos ámbitos y a continuar fortaleciendo el diálogo con otras regiones como la Unión Europea. En ese contexto, se realizará en San Salvador, en octubre del próximo año, la Cumbre de CELAC con dicha región.
Todo esto, pues, es gracias al camino que como sociedad salvadoreña hemos venido construyendo; y es también el fruto de una política exterior abierta al mundo y sin ataduras ideológicas que iniciamos en 2009, que hemos consolidado durante el gobierno del presidente Sánchez Cerén, y que tiene en la promoción de los derechos humanos, la integración, el comercio y la cooperación algunos de sus más fuertes pilares.
Celebremos entonces, como nación, estos reconocimientos que son de todos y todas, y asumámoslos con el compromiso que conllevan, para abonar al desarrollo de nuestra gente y al de nuestros hermanos de la región y el mundo.